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Publicado el 17 de julio de 2025 - Tiempo de lectura: unos 15 minutos (pero tómate tu tiempo, ese es el objetivo :-)

Mi historia con las pantallas: una confesión

Todavía recuerdo el día que me pasé la salida de la autopista por estar demasiado ocupado revisando mis notificaciones. Nada grave, solo 20 minutos perdidos y un poco de gasolina. Pero fue mi sorpresa personal.

Esa noche, revisé mi tiempo de pantalla: 5 horas y 37 minutos al día de media. Más tiempo del que pasaba durmiendo, hablando con mis seres queridos o haciendo cualquier otra cosa. ¿Te has atrevido alguna vez a revisar el temporizador de tu pantalla?

Si estás leyendo este artículo, probablemente sea porque tú también sientes esa vaga inquietud, esa sensación de que tu teléfono te controla más a ti que a ti. ¡Bienvenido al club de los "adictos al teléfono que quieren dejarlo"!

Este programa de 21 días nació de mi propia experiencia (https://www.addictaide.fr/addiction/addiction-aux-ecrans/) , de las investigaciones científicas más recientes y de los testimonios de decenas de personas a las que he apoyado. No es perfecto (nada lo es), pero está comprobado. Así que, ¿estás listo para retomar el control?

Resumen

¿Por qué 21 Días? La ciencia detrás del programa

“Se necesitan 21 días para crear un nuevo hábito”. Probablemente ya hayas oído esta afirmación. La realidad, como siempre, tiene más matices.

El mito de los 21 días

Esta creencia popular proviene del trabajo del Dr. Maxwell Maltz, cirujano plástico de la década de 1950, quien observó que sus pacientes tardaban unos 21 días en adaptarse a sus nuevos rostros. Pero ojo: hablaba de un mínimo, no de una regla absoluta.

Una investigación más reciente del University College de Londres sugiere que un nuevo comportamiento tarda un promedio de 66 días en automatizarse. Algunos hábitos pueden arraigarse en 18 días, mientras que otros tardan hasta 254 días. No es muy alentador, ¿verdad?

Entonces ¿por qué 21 días?

Elegí esta duración por tres razones principales:

  1. Este tiempo es suficiente para observar cambios neurológicos reales (la neuroplasticidad comienza a operar).
  2. Es lo suficientemente corto para mantenernos motivados y ver la luz al final del túnel.
  3. Está estructurado en tres semanas distintas , cada una con sus propios objetivos.

Como me dijo Jeanne, de 42 años, después de seguir este programa: "Los primeros cinco días fueron un infierno. La segunda semana fue soportable. Para la tercera semana, empecé a preguntarme por qué antes era tan adicta a mi teléfono".

Lo que dice la ciencia sobre nuestra adicción a los teléfonos inteligentes

Algunas cifras para reflexionar:

  • Revisamos nuestros teléfonos un promedio de 58 veces al día (estudio de RescueTime, 2024)
  • El 46% de los usuarios afirma que “no podría vivir sin su teléfono inteligente” (Pew Research)
  • Cada notificación desencadena una liberación de dopamina comparable a la de una pequeña recompensa de comida.

La Dra. Anna Lembke, psiquiatra de Stanford especializada en adicciones, explica que nuestros teléfonos inteligentes activan el mismo circuito de recompensa que las drogas, pero con acceso constante. "Es como tener un dispensador de cocaína en el bolsillo, disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana", me dijo durante una entrevista para mi podcast el año pasado.

Me impactó esta comparación, que puede parecer excesiva. Sin embargo, al observar mis propios comportamientos (como mirar el teléfono en el baño, al despertar, durante las conversaciones), debo admitir que se parecen extrañamente a los de una adicción.

Antes de empezar: prepara tu desintoxicación

Como con cualquier cambio significativo, la preparación es crucial. Aquí te explicamos cómo poner las probabilidades a tu favor:

Hacer un diagnóstico honesto

Antes de empezar, tómate una semana para observar tus hábitos digitales sin cambiar nada:

  • Habilite el seguimiento del tiempo de pantalla en su teléfono
  • Escribe cuándo, por qué y cómo utilizas tu teléfono inteligente
  • Identifica tus desencadenantes emocionales (aburrimiento, ansiedad, soledad, etc.)

Define tu “por qué”

Motivaciones vagas como "pasar menos tiempo con el teléfono" rara vez se sostienen en el tiempo. Profundiza:

  • ¿Qué quieres a cambio? ¿Tiempo? ¿Atención? ¿Relaciones?
  • ¿Qué aspectos de tu vida están sufriendo por el uso excesivo?
  • ¿Cómo te sentirás después de estos 21 días?

Anota estas razones y mantenlas visibles. Los momentos difíciles llegarán (créeme), y tendrás que recordarte por qué estás haciendo este esfuerzo.

Prepara tu entorno

Nuestro entorno influye fuertemente en nuestro comportamiento.

https://www.psychologie-sociale.com/index.php/fr/theories/influence-et-persuasion/17-l-influence-de-l-environnement

Algunos ajustes sencillos:

  • Compra un despertador clásico para sustituir la alarma del teléfono.
  • Designa zonas libres de teléfonos en tu casa (dormitorio, comedor)
  • Prepara alternativas : libros, juegos, actividades manuales...
  • Informa a tus seres queridos sobre tu enfoque para obtener su apoyo.

Consejo personal : Compré una caja con temporizador que solo se abre después de un tiempo determinado. Meto mi teléfono dentro durante los momentos de parto intenso. Suena extremo, ¡pero ha sido una gran revolución para mí!

Elige tu nivel de compromiso

Este programa ofrece tres niveles de intensidad. Elige el que mejor se adapte a ti:

  • Nivel principiante: Reducción gradual, zonas y horarios sin teléfono
  • Nivel intermedio : Teléfono básico entre semana, smartphone los fines de semana.
  • Nivel Avanzado: Cambio completo a un teléfono sin internet durante 21 días

Sé ambicioso, pero realista. Es mejor tener éxito a un nivel moderado que fracasar a un nivel demasiado exigente.

Primero probé el nivel avanzado y me desmoroné a los 3 días. Me sentí muy culpable... Luego volví a empezar en el nivel principiante y logré aguantar los 21 días. Ahora estoy en el nivel intermedio y se ha convertido en mi nueva normalidad. - Marc, 37

Semana 1: Conciencia y primeros pasos

El objetivo de esta primera semana no es eliminar por completo el uso del teléfono inteligente, sino recuperar el control consciente de nuestra relación con él.

Día 1-3: Observación activa

Objetivo : Tomar conciencia de tus hábitos sin cambiarlos todavía drásticamente.

Acciones concretas:

  • Activa las notificaciones de tiempo de pantalla (sí, la ironía es deliberada)
  • Instala una aplicación que cuente tus desbloqueos
  • Antes de cada uso, pregúntese: "¿Por qué cojo el teléfono ahora?"
  • Mantenga un diario de sus observaciones

Mi experiencia: El primer día, conté 134 desbloqueos. Me quedé atónito. La mayor parte del tiempo, ni siquiera sabía por qué había cogido el teléfono. Se había convertido en un reflejo pavloviano.

Día 4-5: Eliminación de factores desencadenantes

Objetivo: Identificar y neutralizar aquello que te hace revisar el teléfono.

Acciones concretas:

  • Desactivar TODAS las notificaciones no esenciales
  • Cambia tu pantalla a blanco y negro (¡sorprendentemente efectivo!)
  • Reorganiza tu pantalla de inicio: solo las herramientas, no las distracciones
  • Elimina las aplicaciones que más tiempo consumen o que son adictivas

Consejo útil: No borres todo de golpe. Cometí este error y reinstalé todas mis aplicaciones en un momento de debilidad. Empieza con las 2 o 3 más problemáticas.

Día 6-7: Estableciendo los primeros límites

Objetivo: Crear espacios y momentos protegidos en tu día.

Acciones concretas:

  • Establecer horarios sin teléfono (mañana y tarde)
  • Designar áreas libres de teléfonos (dormitorio, mesa de comedor)
  • Prueba un primer día completo sin redes sociales
  • Advierta a sus seres queridos que estará menos receptivo

Dificultad común: Ansiedad por perderse algo (FOMO). Recuerda: antes de los smartphones, las emergencias aún se las arreglaban para llegar a nosotros.

Semana 2: Reconstruyendo nuevos hábitos

Después de una primera semana de concientización, es hora de llenar el vacío dejado por la reducción del tiempo frente a la pantalla.

Día 8-10: Redescubriendo el aburrimiento creativo

Objetivo: Reaprender a no hacer nada sin estimulación digital constante.

Acciones concretas:

  • Practique 10 minutos de "tiempo fuera" voluntario diariamente
  • Observa tus pensamientos cuando surja la necesidad de revisar tu teléfono.
  • Intente realizar actividades monótonas sin distracciones (caminar, esperar el autobús, etc.)
  • Escribe las ideas que surgen durante esos momentos de aburrimiento.

Anécdota personal: Fue durante un viaje en tren sin teléfono (con la batería agotada) que se me ocurrió este programa de desintoxicación digital. ¡El aburrimiento puede ser increíblemente productivo!

Día 11-14: Reconectando con las alternativas

Objetivo: Redescubrir actividades que nutran tu mente y tu cuerpo.

Acciones concretas:

  • Dedica 30 minutos al día a una actividad manual (dibujar, hacer jardinería, cocinar, etc.)
  • Reconecta con un amigo en persona, no a través de pantallas
  • Lea un libro físico durante al menos 20 minutos diarios.
  • Explora tu vecindario sin GPS ni teléfono

Consejo clave: No conviertas estas actividades en nuevas obligaciones estresantes. La idea es redescubrir la alegría, no añadir más tareas a tu lista de pendientes.

Volví a retomar mis pinceles después de 15 años sin pintar. Los dos primeros días me sentí frustrada por mis mediocres resultados. Luego me di cuenta de que pintaba por el proceso, no por el resultado. Esta revelación cambió mi forma de abordar muchos otros aspectos de mi vida . - Samira, 45

Semana 3: Consolidación y visión a largo plazo

La última semana tiene como objetivo transformar estos nuevos hábitos en un estilo de vida sostenible.

Día 15-17: Evaluación y ajustes

Objetivo: Hacer un balance de tu progreso y perfeccionar tu enfoque.

Acciones concretas:

  • Compare sus estadísticas de uso actuales con las del principio
  • Identifique las estrategias que le han funcionado
  • Reconoce cuándo tuviste una recaída y por qué
  • Ajusta tu plan para la última parte del programa.

Observación común: la mayoría de los participantes experimentan una reducción del 50-70% en el tiempo frente a la pantalla en este punto, pero también una disminución significativa en la ansiedad telefónica.

Día 18-21: Creando un equilibrio sostenible

Objetivo: Definir tu relación ideal a largo plazo con la tecnología.

Acciones concretas:

  • Redacta tu “constitución digital personal”
  • Planifique desintoxicaciones regulares (un día a la semana, un fin de semana al mes, etc.)
  • Considere cambios de hardware duraderos (teléfono sin internet, limitaciones del plan de datos, etc.)
  • Celebra tu progreso y comparte tu experiencia

Pregunta que debes hacerte: "¿Qué relación con mi teléfono me permitiría ser la mejor versión de mí mismo?"

Después de la desintoxicación: mantener el equilibrio de forma sostenible

El final de los 21 días no es un fin en sí mismo, sino el comienzo de una nueva relación con la tecnología.

Los peligros de volver a la “normalidad”

Cuidado con las racionalizaciones que pueden hacerte recaer:

  • “Necesito esta aplicación para mi trabajo”
  • "Voy a comprobarlo rápidamente..."
  • “Todo el mundo usa esta aplicación y me banearán”.

He guiado a decenas de personas en este proceso, y el período posterior a la desintoxicación suele ser el más difícil. Nuestro cerebro es muy hábil para justificar el regreso a viejos hábitos que nos hacían sentir cómodos.

Estrategias de mantenimiento a largo plazo

Algunos enfoques probados:

  1. El enfoque minimalista: reinstalar solo las aplicaciones que realmente necesitas, no las que "podrías usar algún día".
  2. La regla de las 24 horas: antes de instalar una nueva aplicación, espera 24 horas para ver si realmente la necesitas.
  3. Desintoxicaciones regulares: Establece periodos sin smartphones (tardes, fines de semana, festivos)
  4. La solución de hardware: considere seriamente un teléfono sin Internet para el uso diario

> Mi elección personal: Después de mi primera desintoxicación, pasé a usar https://thephone.fr/ como mi dispositivo principal entre semana y solo uso mi smartphone los fines de semana. Este cambio ha transformado mi productividad y mi bienestar mental.

La importancia del entorno social

Tu entorno puede ser tu mejor aliado o tu peor enemigo en este proceso:

  • Comparte tu experiencia con tus seres queridos
  • Ofrecer desafíos grupales (cenas sin teléfono, fines de semana desconectados)
  • Encuentra compañeros de desintoxicación para apoyarse mutuamente

Truco que funciona: Crea un "frasco de teléfonos" en las reuniones sociales. El primero que revise su teléfono paga una prenda (o el siguiente café).

Testimonios de participantes en desintoxicaciones anteriores

Laurent, 52 años, alto ejecutivo

Pensaba que estaba demasiado ocupado para reducir el uso del teléfono. ¿La verdad? Soy mucho más eficiente desde que limité el tiempo que paso frente a la pantalla. Las notificaciones constantes fragmentaron mi pensamiento. He recuperado mi capacidad de concentración profunda, que creía haber perdido con la edad.

Amina, 28 años, diseñadora gráfica

La primera semana fue HORRIBLE. Me sentía como un drogadicto en abstinencia. Entonces ocurrió algo extraño: volví a dibujar por diversión, no solo por trabajo. Mis noches son mejores, mis pensamientos más claros. Nunca volveré a mi antigua relación con el teléfono.

Víctor, 19 años, estudiante

Mis amigos se burlaron de mí cuando empecé esta desintoxicación. Tres semanas después, dos de ellos me preguntaron cómo hacer lo mismo. ¿Qué me sorprendió más? Mi capacidad de atención durante las clases mejoró significativamente. Y, al contrario de lo que temía, mi vida social no se vio afectada, sino que se enriqueció.

Marie, 35 años, madre de dos hijos

Me di cuenta de que les estaba pidiendo a mis hijos que limitaran el uso de las pantallas mientras yo no podía soltar las mías. Esta hipocresía me pesaba. La desintoxicación fue un proyecto familiar: todos redujimos el consumo juntos. Las primeras cenas sin teléfono fueron extrañamente silenciosas. Ahora hablamos más que nunca.

"https://www.parentalite-numerique.fr/

Preguntas frecuentes y obstáculos comunes

Mi trabajo requiere que esté conectado. ¿Cómo puedo lograrlo?

Esta es la principal objeción que escucho. Algunas soluciones:

  • Distinguir claramente entre usos profesionales y personales
  • Utilice aplicaciones de bloqueo durante sus horas de concentración
  • Negocia periodos de desconexión con tu equipo
  • Prueba un teléfono con doble SIM: negocios durante el día, personal por la noche

Un ejemplo: un médico al que asesoré configuró su teléfono para que solo las llamadas del hospital entraran durante su horario personal. Todo lo demás esperaría hasta el día siguiente.

Me siento ansioso sin mi teléfono. ¿Es normal?

¡Totalmente normal, e incluso previsible! Esta ansiedad es un síntoma clásico de abstinencia. Aquí tienes algunos consejos:

  • Reconozca esta ansiedad como temporal
  • Practique ejercicios de respiración cuando ocurra.
  • Comience con períodos cortos sin teléfono.
  • Aumentar gradualmente la duración

¿La buena noticia? Esta ansiedad suele disminuir después de 3 a 5 días.

Fracasé y volví a caer en mis viejas costumbres. ¿Qué debo hacer?

Primero, deja ir la culpa. No ayuda. Luego:

  • Analiza qué desencadenó tu recaída
  • Reanudar a un nivel menos ambicioso
  • Centrarse en las pequeñas victorias
  • Considere recibir asesoramiento o un grupo de apoyo.

Recordatorio importante: La perfección no es el objetivo. El progreso sí lo es.

 Mi entorno sabotea mis esfuerzos. ¿Cómo puedo controlarlo?

Una situación clásica y frustrante. Algunas estrategias:

  • Explica tus motivaciones (sin juzgar sus hábitos)
  • Sugerir compromisos (por ejemplo, guardar los teléfonos durante las comidas)
  • Encuentra aliados en otros lugares si es necesario.
  • Mantente firme en tus límites personales

Conclusión: Más allá de la desintoxicación

Esta desintoxicación digital no es un fin en sí misma, sino el comienzo de una relación más consciente con la tecnología. El objetivo no es rechazar los smartphones —esas herramientas increíbles—, sino devolverles su lugar: herramientas que nos sirven, no amos que nos controlan.

Como me dijo un participante: "No hice esta desintoxicación para usar menos mi teléfono. Lo hice para vivir más mi vida".

Y tú, ¿estás listo para retomar el control?

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Sobre el autor: Tras 12 años trabajando en Silicon Valley diseñando aplicaciones adictivas, cambié mi enfoque para ayudar a las personas a recuperar su autonomía digital. Ahora imparto talleres de desintoxicación digital y guío a empresas y particulares hacia un uso más equilibrado de la tecnología.

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Fuentes y referencias

  1. Tisseron, S. (2023). La regla 3-6-9-12: Dominando las pantallas y creciendo. Érès Éditions.
  2. Médiamétrie. (2020). Junior Connect 2020: Jóvenes y pantallas. Recuperado de https://www.open-asso.org/presse/2020/02/smartphones-les-enfants-recoivent-leur-premier-telephone-a-9-ans/
  3. Academia Estadounidense de Pediatría (2024). Consejos de la Academia Estadounidense de Pediatría sobre niños y medios de comunicación. Recuperado de https://www.aap.org/en/patient-care/media-and-children/
  4. Consejo Nacional para la Protección de la Infancia (2023). Informe sobre la exposición de menores a las pantallas. Recuperado de https://www.francebleu.fr/infos/sante-sciences/ecrans-et-enfants-un-rapport-preconise-leur-interdiction-avant-3-ans-et-l-usage-du-smartphone-a-partir-de-11-ans-8060094
  5. Wagner, L., et al. (2024). Uso de teléfonos inteligentes y desarrollo cognitivo en adolescentes: Un estudio longitudinal. Revista de Desarrollo Cognitivo, 35(2), 178-196.
  6. Universidad de Montreal. (2023). El impacto de las pantallas en las interacciones sociales de los adolescentes. Revista Canadiense de Psicología, 64(3), 219-234.